La combinación adecuada entre los elementos que formarán parte de un proyecto industrial definirá a lo largo y final del proyecto el alcanzar el éxito. El comienzo del proyecto suele ser la etapa más complicada debido a problemas propios que se deben enfrentar como es recursos económicos, tiempo, capacidad técnica, entre otros.
Algunos de los puntos más importantes a tener en consideración en la realización de un proyecto industrial es: la buena planificación, el iniciar un proyecto sin una buena estructura y planificación es seguro que traerá problemas a corto plazo. El uso adecuado de recursos, esto incluye tanto económicos, como humanos y materiales. Considerar riesgos y contingencias, los imprevistos existirán a pesar de tener una buena planeación por lo que en medida de que se tenga contemplado un plan de contingencias, éste permitirá aminorar los efectos de los imprevistos.
La comunicación y el trabajo de todos los integrantes de equipo del proyecto permitirán enriquecer y movilizar todos los elementos definidos durante las etapas de planeación. La responsabilidad en la administración del proyecto equilibrando tiempos y esfuerzos al final dará buenos resultados.
Claridad de objetivos y metas permitirá no perder foco en el camino, definir esfuerzos y canalizar detalles a buen término. Se considera que un proyecto industrial es bueno cuando al ponerse en acción el camino para llegar a los objetivos se mantienen estables los presupuestos y se mantienen controlados dentro de las expectativas iniciales.
Cuanto más rodeado un proyecto este de personas con amplia capacidad técnica y buena actitud, permitirá que fluya todo el desarrollo de una manera exitosa, esto ahorrara tiempos perdidos en falta de experiencia y empeño en las diferentes actividades del proyecto industrial. Las ideas innovadoras serán siempre bien recibidas y una vez evaluadas permitirán en la mayoría de los casos enriquecer el proyecto.
Algunos signos de que el proyecto industrial no va por un buen camino pueden ser: que se ha rebasado de manera significa los costos presupuestados, el proyecto no tiene que ver a lo largo del tiempo con los propósitos y metas definidos, los procesos administrativos no están resultado adecuados, los clientes se encuentran insatisfechos con los avances del proyecto industrial, la actitud del equipo de trabajo es mala y la capacidad técnica de los integrantes no cumple con las expectativas del proyecto, no se cumple con las necesidades para las que fue concebido el proyecto.
Al presentarse alguno de los signos de mal camino del proyecto, se deben enfocar esfuerzos para identificar las fallas y hacer todo lo posible para retomar el rumbo, para evitar pérdidas y fracasos en el proyecto industrial.
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